El cierre de la semana económica en Argentina ha sido optimista para el Gobierno Nacional, luego del anuncio de la salida parcial del control cambiario. Sin embargo, en diálogo para Canal E, Hernán Gil Forleo, economista de la Universidad de Morón, “la primera etapa de la gestión económica ha sido positiva”.
En particular, el Gobierno ha logrado normalizar el mercado cambiario y recomponer las reservas del Banco Central, lo que ha permitido una estabilización de los precios y tipos de cambio. En sus propias palabras, “el gobierno ha logrado estabilizar tanto los precios como el tipo de cambio en menos de un año, lo cual es un logro significativo”
Gil Forleo resaltó que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha sido clave, ya que no solo estabilizó el mercado cambiario, sino que también permitió un control más estricto sobre las variables monetarias. “La suba del tipo de cambio ya se había evidenciado desde fines de febrero, por lo que el acuerdo con el FMI fue bastante razonable y alcanzable”, explicó.
¿Qué viene después de la estabilización?
Aunque la primera fase se considera exitosa, el economista cree que el gobierno debe ahora centrarse en objetivos más complejos. “El gobierno tiene una asignatura pendiente, que es el crecimiento económico”, aseguró. A su juicio, el reto de la segunda etapa será estabilizar el sector real de la economía. “Ya estabilizaste el mercado monetario, ahora el desafío está en el sector real”, comentó.
Para Gil Forleo, el 2025 será clave para el futuro económico del país, ya que estará marcado por elecciones y la necesidad de mejorar el marco de inversiones y el sistema tributario. “El gobierno necesita trabajar en la relación entre impuestos, crecimiento e inversión, además de enfrentar las distorsiones tributarias que afectan a la economía.”, añadió.
El impacto del tipo de cambio y la inflación
Uno de los puntos más sensibles es la inflación, que en los últimos meses ha mostrado señales de desaceleración. Según Gil Forleo, el Gobierno ha logrado controlar la inflación gracias a una política monetaria más disciplinada, que incluye la reducción de la emisión de dinero. “Desde febrero del año pasado, la inflación está en una fase descendente, y eso no ha cambiado”, afirmó.
Sin embargo, también advirtió que la inflación podría experimentar pequeños picos durante los próximos meses. “Marzo, abril y mayo son meses de ajuste en los precios, principalmente por la reactivación de la actividad económica tras el verano. Esto podría generar un ligero aumento en los precios, pero no al nivel alarmante que algunos prevén”, explicó.
Un futuro más estable pero incierto
Finalmente, Gil Forleo se mostró optimista sobre el futuro cercano, señalando que la inflación podría seguir cayendo. “Si la inflación se mantiene por debajo del 4% mensual, el Gobierno estará en camino de cumplir con sus objetivos”, agregó. Sin embargo, recordó que el verdadero desafío será enfrentar las distorsiones fiscales y lograr un crecimiento sostenido.
“Lo importante será que el Gobierno siga trabajando en el segundo bloque de objetivos para que, al final del año, podamos hablar de una economía más sólida y con perspectivas de crecimiento”, cerró.