Una nena de 13 años asistió al Hospital Posadas, en Saladillo, con un fuerte dolor abdominal, pero cuando los enfermeros la atendieron se dieron cuenta de que estaba embarazada de 35 semanas. Sus molestias eran porque ya estaba en trabajo de parto. La nena asistió al hospital con la madre, quien dijo que no sabía que su hija estaba embarazada.
Después de que la niña parió, los médicos avisaron al organismo de Niñez y Adolescencia del Municipio Saladillo para que investiguen si se el embarazo se dio como consecuencia de un abuso.
Ahora la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2 Saladillo, a cargo de Roberto Javier Berlingeri, la está investigando tanto a la madre como a su pareja por presunto abuso sexual. Por el momento, no se ordenaron medidas contra la pareja que está en libertad mientras avanza la causa.
Este hecho conmocionó a la ciudad de Saladillo, donde se dio una pueblada y los vecinos rodearon la casa de la familia y prendieron fuego gomas. También se movilizaron en distintos puntos de la ciudad, incluso frente a la casa de la fiscal que lleva el caso. Allí incendiaron un portón, por lo que la Justicia dispuso medidas de protección para la funcionaria.
En medio del escándalo, la Municipalidad de Saladillo emitió un comunicado oficial en el que buscó deslindar responsabilidades y sostuvo que “no existían denuncias previas de vecinos, del sistema educativo, ni del sistema de salud que hubieran alertado sobre esta situación”.
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